El
"focusing" se puede definir como el proceso de prestar
atención a una sensación corporal asociada a algún aspecto de
nuestras experiencias, que se puede sentir muy vagamente en un
inicio, aunque también puede ser una sensación fuerte que amenaza
con desbordarnos. Tomarnos el tiempo necesario para percibir con
paciencia y respeto aquello que estamos sintiendo en nuestro interior
podemos definir qué es lo que nuestra sensación nos quiere decir.
En ese momento, este "querer decir" que notamos dentro
empieza a moverse, generando un cambio a pequeños pasos.
El "focusing" es una técnica y a la vez una habilidad para saber escuchar, es el arte de comunicarse con niños, adolescentes y también con los adultos. Se trata de escuchar, de muchas formas, a nuestro yo más profundo y al del otro. Se trata de escuchar lo que los niños dicen, sienten, piensan, pero también, lo que está a un nivel más profundo que los pensamientos y sentimientos.
El cambio de conductas surge cuando los niños aprenden a escuchar internamente, percibiendo lo que su cuerpo siente. Este proceso de cambio es lo que el "Focusing" consigue.
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